miércoles, 20 de agosto de 2014

5 dííííaaaaaaasss!!¡!

-Ganas? Nervios?
Eso es lo que todo el mundo me pregunta a estas alturas.
+Pues un poco de todo.

Aquello que desconocemos es generalmente lo que más miedo no da, pero lo desconocido no tiene por que ser malo. En realidad, la mayoría de las veces no lo es.
Pero siempre asusta salir de tu zona de confort, con tu rutina y tu preciosa burbuja llena de cosas conocidas que tarde o temprano resultan....ABURRIDAS.
Y para que nos vamos a mentir, la vida es... la vida es muchas cosas, pero de vez en cuando necesita emociones, estímulos que te hagan seguir hacia delante. Como yo siempre digo: cosas que te motiven.
-Motivar es mi palabra, la digo a todas horas-

Cuando yo pensaba en este viaje, en aquellos días en los que el 25 de agosto parecía inalcanzable, no esperaba para nada estar tan calmada. Yo me imaginaba a mi misma histérica la semana antes por todo lo que tendría que organizar y hacer (la maleta, las despedidas,...). Todos los que me conocen saben que me estreso muy fácilmente. Vivo en un estrés constante.
Pero la verdad es que estoy bien, mejor de lo que yo imaginaba.
Para todos aquellos que piensan que hacer una maleta para un año entero implica morir en el intento, sólo os diré que no es para tanto.
Al principio yo pensaba que sí, como todo el mundo, pero una vez que te pones y haces una laaarga lista de todo lo que necesitas llevar es bastante fácil. Sólo necesitas tiempo y organización.
Luego está lo de despedirse. Eso ya es más complicado. Mejor no tocar ese tema.

No he tenido mucho tiempo de escribir porque he estado de vacaciones, pero espero usar este blog lo máximo posible a partir de ahora.
PD. Es necesario desconectar antes de un viaje largo. Y hacer una maleta precalentamiento antes del gran GRAN reto final ayuda bastante.



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